Alien el octavo pasajero (1979)

Si tuviera que escoger una película que llevarme a una isla desierta, aquella típica y tópica situación en la que probablemente (y afortunadamente) no nos veremos nunca, una de las que escogidas sin duda sería Alien.
Habría alguna otra en esa peculiar lista y desde luego, una de ellas sería su segunda parte, Alien's. Película que infringe la tan temida ley de que "segundas partes nunca fueron buenas". En este caso fue, hasta casi mejor que ser predecesora.

Pero Alien fue la primera. La que marcó un antes y un después en la historia del cine y sobretodo en la ciencia ficción.
Fue la que nos hizo ver una historia de sci-fi y pensar que podría suceder. Nos hizo creer en algo más. Y nos hizo estremecer de miedo.
La primera película que utilizó fundamentos científicos y no quimeras. Uno de los más recordados es que en el espacio exterior no hay sonidos. Y fue la frase que escogieron para meternos aún más miedo en el cuerpo: en el espacio, nadie para oír tus gritos.

Pionera también en poner a una mujer como la heroína del grupo, cosa que no se acostumbraba a ver. Al menos como personaje principal.
La teniente Ripley nos demostrará que la única manera de luchar contra contra el enemigo es enfrentarse a él, aún con el miedo en tu hombro, no queda otra que plantarle cara.

El personaje está magníficamente desarrollado por Sigourney Weaver y será clave para el desarrollo de las película. Y se convertirá en un icono en el cine. A partir de ahí, otras mujeres saldrán al paso de otras amenazas, pero nunca con el carisma de Ripley.

Y es que el personaje no es simplemente una heroína al estilo de Lara Croft o de cualquier subespecie de ese tipo, sino que es una mujer normal y corriente, con miedos y dudas. Alguien que se verá obligada a luchar o morir y que sacará el valor y el temple de su interior. Ripley se nos presenta como alguien serio, creíble y eso hace de la película algo mucho mejor aún.

El resto de actores es sencillamente magnífico. Cada uno tendrá una profundidad y una personalidad muy marcada que hasta que les recordemos siempre, cosa que no siempre pasa. Muchas veces nos acordamos del protagonista, tal vez de algún actor más, pero no siempre de todos.

- Ash (Ian Holm, muy lejos de su Bilbo Bolsón) será el encargado de dar el toque de desconfianza hasta llegar a conocer su sorprendente naturaleza y sus ocultas intenciones.

- Dallas (Tom Skerrit) el comandante de la misión y gran amigo de Ripley, representará junto con ella, la parte seria y serena de la tripulación.

- Kane (el gran John Hurt) nos enseñará lo mal que pueden llegar a sentarnos unos spaguettis y protagonizará una de las escenas más recordadas y espectacular de la historia del cine. Nada fue igual después de aquella comida. Es el soñador del grupo, el aventurero.

- Parker (Yaphet Kotto) será el tripulante que siempre está protestando junto con su fiel amigo Brent.

- Brent (Harry Dean Stanton) nos llevará de la mano de su famosa contestación "claaro..." y su famosa gorra.

-Lambert (Verónica Cartwright) será en este caso, el personaje antónimo de Ripley. Con el miedo a flor de piel toda la película y el pánico amenazando con desbordarla, será el contrapunto del temple de la teniente. Su gran actuación de verá recompensada por un premio Bafta.

- Jonsie, el gato que pulula por la nave y que será protagonista también de una de las escenas clave de la película. Sus ojos asustados contemplarán de lo que es capaz el ente.

Y por fin, llegamos al bicho... Uno de los personajes que más miedo han provocado en el cine: el Alien.
Cómo dato curioso, decir que debajo de aquel ser temible se encontraba un actor llamado Bolaji Badejo, un chico nigeriano que estudiaba diseño y trabajaba en un bar. De más de dos metros de altura y una complexión muy delgada, que tuvo que soportar interminables sesiones de maquillaje para convertirse en el monstruo alienígena.

Una vez dentro de la nave, irá acabando con la tripulación uno por uno, sin dar tregua a ninguno y proporcionándonos una idea muy diferente de la que teníamos hasta ese momento de lo que podía ser un alienígena hostil. Sus características sorprendieron al mundo del cine. Alien era original, fresco, con una naturaleza no malvada, sino simplemente, que obedecía a sus instintos y nada más, sin remordimientos, sin culpa. Cómo dice Ash "un feroz hijo de puta".

Ridley Scott, consigue meternos en una atmósfera oscura y temible, generando una tensión insoportable y una historia insuperable. Junto a la soberbia BSO, de Jerry Goldsmith, iremos adentrándonos junto a los personajes en la magníficamente recreada Nostromo y mascaremos la angustia y el terror que el director supo imprimirle a la película.

Los guionistas O'Bannon, Hill y Sushett consiguieron un relato inolvidable, lleno de sobresaltos y que nos hace replantearnos nuestra propia existencia y desde luego la ficción de que nos encontremos solos en este vasto universo en el que vivimos, pero además nos hace temblar con la sola idea de imaginarnos una realidad en la que existen seres como el Alien.

Curiosamente, el título en principio pensado para la película fue "Star Beast" ("Bestia estelar"), pero fue O'Banon el encargado de encontrar el de Alien, el octavo pasajero. Mucho más acorde, desde luego. Porque ya nos indica que alguien más viaja con los tripulantes.

Al comienzo del rodaje, parecía que iba a ser otra película más, de bajo presupuesto, en el maltratado género sci-fi pero Scott consiguió más presupuesto, prometiendo a los productores un film más serio y dramático.

Cuando se estrenó, tuvo una enorme acogida, sobretodo por los efectos especiales y la música siendo considerada aún, una de las mejores películas del género de todos los tiempos.
Fue ganadora de un Óscar por estos efectos y Verónica Cartwright, también consiguió uno en la categoría de secundaria por el excelente y neurótico papel que interpreta.

Ganadora asimismo de otros premios, fue incluida en el Registro Nacional de Cine de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos en 2002, para su preservación histórica al ser considerada una película «cultural, histórica y estéticamente significativa».
Y en 2008, el American Film Institute la escogió como la séptima mejor película en el género de la ciencia ficción.
Al mismo tiempo, la revista británica Empire la consideró como la tercera mejor película de todos los tiempos.

La película, aparte de los propios beneficios que generó, produjo una franquicia espectacular de cómics, novelas, videojuegos y juguetes.
Detrás de Alien, vendría la fenomenal secuela Alien's, cuya historia fue más militarizada y espectacular aún, y dos más que no tuvieron probablemente la calidad argumental de las dudas primeras, ni su éxito.
Después vendría la precuela Prometheus, tomando como base la historia que se cuenta parcialmente al principio y dos películas en las que Alien se enfrentaría a otro de los grandes "bichos" del cine: Predator. Serían las dos Alien vs Predator.

Alien fue la inspiración para muchas otras películas que vendrían después, pero que jamás consiguieron arrebatarle su soberanía. Incluso el guión género muchos debates filosóficos y académicos.

La idea de unos tripulantes que eran más camioneros espaciales que astronautas, subyugó al público, haciéndoles empatizar sin más con ellos. No eran súper hombres ni super mujeres: eran personas normales, trabajadores en un carguero, solo que en este caso se había sustituido la carretera por el espacio. Gente que vivía y trabajaba.

Todas esas características hacen de Alien algo muy especial. Una película para no olvidar y para volver a ver de tanto en tanto. Para poder agarrarnos otra vez al mango del sofá cuando oigamos aquella fatidica frase de "Dallas, por ahí noooo...!"

Tal vez en esta ocasión, podamos sobrevivir. Aunque...

"No tenéis ninguna posibilidad, pero... contáis con mi simpatía" (Ash. Oficial científico de la Nostromo)